En 1979" La Fura dels Baus" inicia su andadura como grupo de animación de calle actuando en distintos pueblos y ciudades de Catalunya. Esta primera etapa duraría 5 años y en ella el grupo experimentó con muchos de los rasgos estéticos que luego constituirían su lenguaje. En 2009 el año arranca con la realización de la puesta en escena de Le grand macabre, una ópera de Ligeti, que se realizó en el Teatro de la Ópera de Bruselas a partir de una escenografía que imitaba a una gran figura humana. "La Fura dels Baus" realiza por primera vez en España, durante el mes de junio, la puesta en escena de dos ciclos completo del El Anillo del Nibelungo, de Richard Wagner, con la representación de las cuatro óperas que integran esta tetralogía: "El oro del Rhin", "La Valquiria", "Sigfrido" y "El ocaso de los dioses". Una coproducción del Palau de les Arts de Valencia y el Maggio Musicale Fiorentino, con Zubin Mehta como director musical.
La lamentable tragedia de Tito Andrónico” de Shakespeare se ha transformado en “Degustación de Titus Andrónicus”, un giro hacia la gastronomía que la Fura del Baus representará el próximo mes de noviembre en Molina de Segura como acto central del quinto centenario de la inauguración del teatro Villa de Molina y en estreno regional.
El montaje ha sido presentado hoy a los medios de comunicación en el teatro Villa de Molina en una rueda de prensa en la que han estado presentes el alcalde, Eduardo Contreras, el director artístico de la obra, Pep Gatell, la concejala de Cultura, Mariola Martínez, y el director del teatro, José Antonio García Molina.
La Fura dels Baus en “Degustación de Titus Andrónicus” ha despojado el texto de los versos de mayor retórica poética para quedarse con aquellos que explican la historia, los que cuentan el enfrentamiento entre Titus, recién llegado a Roma tras vencer a los Godos, y Tamora, madre de una de sus víctimas y futura esposa del emperador Saturnino.
Es un relato de violencia continua, de venganzas y crímenes sucesivos de un Shakespeare joven e impaciente que se lo ha puesto fácil a la compañía catalana, porque permite imprimir al espectáculo un ritmo de vértigo y hacer uso de diversas técnicas de expresión artística, según ha explicado Pep Gatell.
Es un relato de violencia continua, de venganzas y crímenes sucesivos de un Shakespeare joven e impaciente que se lo ha puesto fácil a la compañía catalana, porque permite imprimir al espectáculo un ritmo de vértigo y hacer uso de diversas técnicas de expresión artística, según ha explicado Pep Gatell.
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